¿Qué es la radiografía de columna cervical?
Es un estudio de imagen que evalúa las siete vértebras cervicales, las primeras vértebras de la columna torácica y los espacios intervertebrales. Se realiza en dos proyecciones:
- Anteroposterior (AP): Vista frontal de las vértebras cervicales.
- Lateral (LAT): Vista lateral que muestra la alineación y los detalles estructurales.
¿Cuándo se recomienda?
Este examen es indicado para diagnosticar y evaluar:
- Dolor en el cuello, hombros o parte superior de la espalda.
- Hormigueo, adormecimiento o debilidad: Signos de posible compresión nerviosa.
- Lesiones traumáticas: Como fracturas o dislocaciones.
- Alteraciones estructurales: Hernias de disco, espondilosis u osteoartritis cervical.
¿Qué permite detectar?
- Cambios en la alineación de las vértebras cervicales.
- Anomalías en los espacios intervertebrales.
- Fracturas, fisuras o lesiones en la región cervical.
- Compresión de raíces nerviosas o de la médula espinal.
Ventajas de la radiografía cervical (AP y LAT)
- Rápida y precisa: Ideal para evaluar síntomas de origen cervical.
- No invasiva y segura: Proporciona una visión clara de las estructuras vertebrales.
- Ayuda a planificar tratamientos, desde terapias conservadoras hasta procedimientos quirúrgicos.
La radiografía de columna cervical AP y lateral es fundamental para evaluar afecciones cervicales, permitiendo un diagnóstico claro de las posibles causas de dolor o disfunción en esta región.